¡¡CAOS EN NAVARRO!!

Había generado gran expectativa la nueva presentación de Navarro, con su nueva adquisición: Félix Anguilesi. Todos soñábamos con un triunfo que nos pusiera a tiro nuevamente, pero la ilusión duró muy poco, ya que a poco de comenzado el encuentro, un descuido de la defensa comandada por Miguel Agustin nos dejó 0-1. Sería precisamente este jugador que dejaría perplejos a propios y extraños cuando a los pocos minutos cometería una descomunal infracción dentro del área penal, digna de un karateca, que nos pondría 0-2. Cuando parecía que este penal desmoralizaría al equipo, apareció la garra y el amor propio, y después de una buena jugada individual del Dr. Anguilesi, Walter Gesto estableció el descuento.
Era el momento para buscar el empate, pero un nuevo descuido defensivo selló el 1-3 con el que terminó el primer tiempo.
En el complemento, Rampi reemplazó a Pintado en el arco y Montesanto lo hizo por el dolorido Dávila. Solo segundos bastaron para que Rampi batiera un nuevo récord de ineficacia y recibiera el cuarto gol. Nuevamente apareció el temple de un equipo que no se daba por vencido y con goles de Pipi y Gesto nos ilusionamos con un empate que poco antes parecía improbable. Pero Navarro siempre sorprende, y esta vez fue el turno de Jimmy, que ante un supuesto foul no cobrado en su contra, lanzó una serie interminable de insultos e improperios hacia un sorprendido árbitro que no dudó en expulsarlo. Ésta actitud de desquicio del señor Jimmy fue el principio del fin, y así fué como Rampi adquirió para su extensa colección, un nuevo gol de 40 metros por elevación. Como frutilla del postre, contagiado por la locura generalizada, Félix decidió emular a Kuky (aunque sin lograrlo) y cometió un evidente y grosero penal que dió cifras definitivas al maracador: ¡¡¡3-6!!!
Se viven horas tensas en el seno de un plantel que físicamente se deteriora poco a poco, una dirección técnica a la deriva y una comisión directiva cuestionada en su éticay su moral.